Esta poesía me da risa, porque quien me inspiró, no fue tan cruel, aunque creo que, por el resultado, produjo el mismo sentimiento... Como quiera que sea, le agradezco (a la poesía) haber sido mi desahogo...
JDRP
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Diste una estocada
Como no hubo ninguna
Sin compasión alguna
A mi alma acorralada
Diste a tu legión,
De infames desafueros,
Mandatos muy certeros
De destrozar mi corazón
Exigiste una fortuna
Moneda de lágrimas y llanto
Buscando callar mi canto
Que tan bien de tu mal vacuna
Una estocada diste,
Pero no aseguraste certeza
Y gallarda como condesa
Ni la herida me viste
Giraste ciento ochenta,
Sin dudar tenías prisa,
Ibas a casa de Artemisa
Como siempre a dar cuentas
Una estocada diste,
Pero no miraste mi cara,
Sonriente, por la mampara
Que en vez de mí, tu rompiste
05/05/2008
Clases de Esgrima sobre Blancos Peligrosos y Blandos
Categorías(*) y Autores:
* Poesía,
José Daniel Rosario Pérez
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